A principios de los 2000 era una mujer empresaria con dos bebés y una casa que se me hacía grande...Las circunstancias hicieron que a través de mis hijas me llevasen a descubrir la homeopatía y la medicina natural, después mi pareja me mostró el shiatsu, y una cosa fue llevándome a otra, hasta encontrarme con yoga.
Dejé mi negocio y emprendí una nueva aventura, descubriendo una forma de vida “diferente”, a través de mis maestros en las diferentes disciplinas. En 2008 finalicé la formación en shiatsu, reconocida por APSE y a nivel Europeo por la FES; en 2012 completé el curso de Terapia Floral Evolutiva, en la Escuela Andalusí, aunque seguí la linea de desarrollo interior en la escuela por 3 años más. Estoy titulada en yoga aéreo por el Instituto Europeo de Yoga, RYT Yoga Aliance 200h.
Pero lo que realmente me condujo hacia el equilibrio y hacia un estilo de yoga verdaderamente nutritivo para mi en todos los niveles, fue descubrir el yoga Iyengar. Disciplina que practico desde hace más de siete años. A través de este método, y , de la mano del reconocido José María Vigar, y otras maestras, he podido evolucionar en mi práctica de āsana y en mi lado humano. Definitivamente, el yoga me trasformó y trasformó mi forma de ver las cosas.
En la actualidad continúo mi formación en Iyengar con mi maestra Carolina Polo, y continúo asistiendo a clases regulares y seminarios con José María Vigar.